El 31 de diciembre de 1884, vino al mundo Elisa de Jesús, en la vereda El Buey, montañosa región antioqueña, jurisdicción del apacible y próspero municipio de Abejorral. Sus padres, Fermín Jaramillo Restrepo y Pilar Botero Campuzano, tuvieron doce hijos. Elisa fue la primogénita. Federico, Fermín José, Leonor, Abel, Baltazar, Cándido, Joaquín, José María, Alonso, Lucila y Obdulio.
Bautizada el 1 de enero de 1885, en la parroquia de Nuestra Señora del Carmen de Abejorral, por el presbítero Jesús María Uribe. Dos años después, entre los días 10 y 11 de septiembre de 1887, fue confirmada en la misma parroquia, por Monseñor Bernardo Herrera y Restrepo.
Elisa creció en un hogar profundamente cristiano; compartió con sencillez y alegría juegos y responsabilidades propios de su edad con sus hermanos menores, bajo la orientación de sus virtuosos padres.
En Abejorral aprendió las primeras letras en la escuela de las “Mejía,” hijas del poeta Epifanio, autor del himno antioqueño. Más adelante, sus padres la llevaron al colegio salesiano María Auxiliadora, de Medellín, donde profundizó su amor y devoción a la Santísima Virgen, bajo la advocación de María Auxiliadora. En el mismo colegio se preparó e hizo la primera comunión con inmenso gozo espiritual. A partir de este gran día, su fervor y amor a la sagrada Eucaristía iría creciendo hasta convertirse juntamente con su devoción mariana, en distintivo de su vida cristiana y religiosa.
